15 de octubre de 2023

TENEMOS UNA MISIÓN 2: NOÉ / DOMUND 2023

Historia de Noé

 

Noé Construye un barco /  Génesis 6 y 7


 

Noé en el Diluvio  / Génesis 7 al 9   

1.- Dios pidió a Noé construir un arca para salvar a todos del diluvio.


La entrada de los animales en el arca de Noé (1556) Aurelio Luini
Iglesia de San Maurizio al Monastero Maggiore de Milán (Italia).


La tierra comenzó a poblarse, pero las personas no tenían un buen comportamiento. 
Dios decidió hacer desaparecer toda su creación a excepción de Noé y su familia, a los que avisó de que enviaría un diluvio. 
Le mandó construir un arca de madera donde embarcaría a toda su familia y a una pareja de cada especie de animales.
Al salvarles, Dios daba otra oportunidad al ser humano, como muestra de su voluntad y para recordar a los hombres que jamás volvería a destruir la tierra con un diluvio, creo El arcoíris. 
De ahí surge el dicho: "Cuando llueve y hace sol, sale el arcoíris del Señor".


ACTIVIDADES:



DOMUND, DOMINGO MUNDIAL DE LAS MISIONES


El Domund es una Jornada universal que se celebra cada año en todo el mundo, el penúltimo domingo de octubre, para apoyar a los misioneros en su labor evangelizadora, desarrollada entre los más pobres.

El Domund es una llamada a la responsabilidad de todos los cristianos en la evangelización. Es el día en que la Iglesia lanza una especial invitación a amar y apoyar la causa misionera, ayudando a los misioneros.

Los misioneros dan a conocer a todos el mensaje de Jesús, especialmente en aquellos lugares del mundo donde el Evangelio está en sus comienzos y la Iglesia aún no está asentada.

 




El Domund es el día en que, de un modo especial, la Iglesia universal reza por los misioneros y colabora con las misiones. #DOMUND

Se celebra en todo el mundo el penúltimo domingo de octubre, el “mes de las misiones”.

“Corazones ardientes, pies en camino”

Solo el encuentro con el Resucitado ilumina nuestra vida y hace arder nuestro corazón. Lo han experimentado los misioneros y misioneras, quienes, con su corazón ardiente, nos muestran el camino hacia los hermanos más pobres y necesitados, y la presencia del Señor vivo en medio de ellos.

Ese encuentro personal con Cristo hace que los ojos de las personas se abran y mueve a la acción. Así, los misioneros se ponen en camino y entregan su vida para que el Evangelio llegue a todos los rincones del mundo.






Comprender que Dios nos toca el corazón para que nos pongamos en camino.

Asumir la misión de trabajar para crear un mundo mejor.

"Salgamos con los corazones ardientes, los ojos abiertos, los pies en camino…, para invitar a todos a caminar juntos por el camino de la paz y de la salvación que Dios, en Cristo, ha dado a la humanidad" (papa Francisco).

Para comenzar y dar contexto a esta Jornada del Domund (22 de octubre), leemos juntos Lc 24,13-35. Podemos representar el pasaje del Evangelio para intentar mantenerlos atentos.

Después, vamos a preguntar algunas cuestiones para ver si lo han entendido bien:

¿Quiénes estaban de camino? ¿Adónde iban?

¿A quién se encuentran? ¿De qué hablan durante el camino?

¿Cuándo descubren quién es el que camina con ellos? ¿Qué pasa entonces?

¿Qué ocurría en su corazón mientras Jesús les explicaba las Escrituras?

¿Qué hacen después?



 

La historia de la Iglesia está tejida por corazones ardientes que, como los discípulos de Emaús, se encuentran con Jesús vivo y resucitado, y se ponen inmediatamente en camino para anunciarlo a quienes aún no le conocen.

Uno de ellos es el padre Saturnino Pasero, 37 años en la misión de Benín.

La vocación misionera de Saturnino le llevó a ir a una misión en la que la Iglesia no existía: “nos pidieron ir a una zona donde no había nada, pero se sentía un deseo por parte de algunas comunidades de seguir el camino de Jesús.”


 



No hay comentarios:

Publicar un comentario